Si bien el empate en Cúcuta nos dejo un sabor agridulce y aunque se obtuvo un valioso empate como visitante se cedió el liderato, no hay que amilanarnos, ni bajar los brazos, lo que viene es prometedor y hay que seguir acompañando al equipo.
A Santa Fe le esperan dos partidos de local y una visita antes de los cuadrangulares, para recuperar terreno en la reclasificación y entrar a la fase final de la Liga Postobon pisando fuerte.
Haciendo respetar la casa y conservando la buena racha de visitante, el equipo puede volver a ser el mejor del año.
En el papel, el calendario del Expreso es más favorable que el de los Pijaos y el permanecer mayor tiempo en casa, puede contribuir a la recuperación física del equipo.
Muchos pueden pensar que el haber cedido el liderato es una señal de declive y si a eso le suman la eliminación de la Suramericana, hasta pueden llegar a creer que el ambiente hostil de la prensa y los dudas judiciales, están minando la buena campaña albi-roja.
Pero quienes le seguimos de cerca, sabemos que este “bajón” de ritmo es un aire necesario para arrancar con pie derecho los cuadrangulares, para identificar a tiempo las falencias y convertirlas en fortalezas.
Para que los muchachos se quiten de encima la presión y los ojos de la crítica destructiva y se concentren en hacer cada día mejor su trabajo.
Como cada lunes, empezamos la semana entre los mejores de la Liga y a diferencia de otros equipos que empezaron al igual que nosotros con fuerza el torneo, mantenemos el ritmo y seguimos siendo los más opcionados al titulo.
El llamado como siempre es a acompañar al equipo, el domingo todos al Nemesio porque el Rojo es la Pasión, la mejor herencia que hemos recibido de nuestros viejos y el amor de nuestro amores.