La fría noche del 5 de julio en Buenos Aires, de nuevo me ponía en frente del computador para vivir un partido más de Independiente Santa Fe; aunque no era un encuentro más, era el que me ponía a soñar con estar de nuevo en una final del fútbol profesional colombiano.
Con el gol de Jonathan Copete de cabeza cada vez mi ilusión se hacía realidad; volver a la instancia definitiva del torneo luego de 7 años, sin embargo restaba mucho partido por jugar, las alegrías aún las tenía que controlar y el sufrimiento debía continuar.
A lo lejos escuche un leve silencio en el Campín por el tanto del panameño Román Torres, digo leve, porque a los pocos segundos La Guardia Albiroja Sur (LGARS) continuó alentando para fortalecer a Wilson y sus muchachos «Vamos vamos Santa Fe, hoy te vinimo’ alentar, para ser campeón hoy hay que ganar».
Mis emociones fueron incontrolables cuando de nuevo Copete convirtió el segundo gol para «El león«, con ese espectacular zurdaso de media distancia que dejó sin posibilidades a Julián Meza; se me erizó la piel cuando todo El Campín comenzó de nuevo «Porropopo porropopo el que no salte no es del León».
El juez central Sebastián Restrepo, de discreta actuación, decretó el fin del encuentro y ahí esa ilusión se me hizo realidad, y se que a los miles de hinchas santafereños también, al estar a 180 minutos de volver a la gloria y luego de 37 años de represión, volver a gritar CAMPEÓN!!!! o mejor CAMPEONES HPPPPPPP!!!!
No han pasado 48 horas de haber conseguido el paso a la final y ya comencé a leer y escuchar a muchos «clasiqueros» (como mi papá) en decir «ojalá que no vuelva a pasar lo mismo con Santa Fe» «Santa Fe es la misma cosa» «Ojalá no salgan con un chorro de babas» «la verdad no me ilusiono porque siempre pasa lo mismo»; frases que me emberracan porque se suben al bus de la victoria pero siempre con ese pesimismo y esa ironía.
Señores, si van a apoyar en estos partidos tan decisivos al equipo por favor vayan con la mejor actitud y disposición del caso y si no se llega a conseguir el título, debemos agradecer a Wilson y sus muchachos porque de nuevo nos pusieron a soñar y a sentir toda la pasión que se siente por el fútbol, y como dice uno de los referentes del equipo, ESO ES LO BONITO DEL FÚTBOL!!!!
La bronca que me da es que durante años he presenciado partidos frente a Bucaramanga, Envigado, Huila, Real Cartagena, Centauros, Unión Magdalena, Junior, Tolima, América, Nacional, Millonarios alentando al rojo; viendo triunfos, empates y derrotas de mi equipo del alma; de ese cuadro del cual me enamoré cuando por primera vez mi viejo me llevó al Nemesio Camacho El Campín.
Es por esto que la tristeza, nostalgia, amargura, decepción me invade al no poder asistir a ese gran sueño que tenía, en presenciar a Santa Fe en una final (tampoco pude frente a Nacional en el 2005) y más cerrando de local, teniendo la posibilidad de dar esa soñada vuelta olímpica con el equipo; sin embargo desde Buenos Aires estaré sufriendo, agarrándome los pelos, rezando, madreando y todos los adjetivos que usted le quiera poner para poder gritar CAMPEÓN desde la distancia.
Desde ya miro al cielo para que el próximo 15 de julio cuando el reloj marque las 10 pm (Argentina), 8 pm (Colombia) poder abrazarme con el que esté a mi lado y decirle con lagrimas en los ojos CAMPEONES HPPPPPP!!!!! y así poder cumplir lo que uno de los narradores más conocidos de Colombia dice «COMPAÑERO, QUE ESTA NOCHE NO ME ESPEREN EN LA CASA«.
QUE VIVA SANTA FE CARAJO!!!!!!
Por: Cristian Santos
Twitter: @crisantos31
