La Copa Sudamericana fue el regreso para que los once leones saltaran a la cancha y para que miles los acompañaran en las tribunas.
Las ansias santafereñas transcurrieron durante un día bogotano frio, las ganas de llegar al estadio no se hacían esperar y los comentarios cardenales se escuchaban por todo lado y no era para más pues después de casi dos meses de ausencia el león volvía al Campin con la ilusión de avanzar en la Copa Sudamericana.
Más de 10.000 hinchas llegaron al Nemesio con la fe puesta y la alegría de ver al “Expreso” de nuevo en acción, las horas pasaban y los cánticos alentaban el calentamiento del equipo en la cancha, mientras el frio capitalino desaparecía en las tribunas y los materiales se alistaban para vivir una gran fiesta rojiblanca.
El pitazo inicial se escucho sobre las 8:45 de la noche hora colombiana y las persignaciones se vieron en los rostros cardenales, mientras que en los canales internacionales narraban la fiesta que se vivía en las tribunas.
El “cómo me voy a olvidar cuando era chico y me traía…mi viejo” retumbaba en las tribunas mientras, Sergio Galván se hacía sentir con su juego y seguridad al movilizar el balón, logrando llegadas al arco rival, que lograba controlar el arquero de César Vallejo.
Pasaron 22 minutos de juego y el partido iba de lado a lado, mostrando opciones de cada uno de los equipos donde los guardametas se convertían en las figuras del momento, mientras los ahogos de gol se sentían en el renovado Nemesio Camacho El Campin.
El primer tiempo termino con los arcos en cero y la clasificación momentanea para Santa Fe, pero entre los hinchas se escuchaban las peticiones para que el segundo tiempo llegara con goles y así lograr asegurar el paso a la segunda fase de la Sudamericana sin tener que sufrir desde el punto penal.
Como si los rezos hubiesen sido escuchados el segundo tiempo inicio con mayor motivación, solidez y concentración en el juego cardenal, los más de 10.000 hinchas empezaban a disfrutar de las atajadas de Camilo Vargas, la magia de Omar Pérez, el equilibrio de Gerardo Bedoya en el centro de la cancha, el amor y garra que le pone Luis Manuel Seijas a la camiseta y sin duda alguna de los golazos marcados por Sergio Galván y Oscar Rodas quienes pusieron a celebrar el paso a la segunda fase de la Copa.
El cronometro marcaba el minuto 55 y Santa Fe aceleraba su juego, la magia de Omar con el balón en sus pies logró un pase de media chilena habilitando a Galván quien logro meter el esférico en el arco peruano, abriendo así el marcador y asegurando aún más la clasificación.
“El que no salte no es del león” retumbaba en las tribunas mientras los abrazos de celebración y de euforia se sentían entre los hinchas que felices desahogaban el grito de gol que por meses duro guardado para este momento.
Los peruanos demostrando poco fútbol intentaron llegar al arco santafereño pero la seguridad de Camilo Vargas estuvo siempre presente, Santa Fe volvía a mostrar el juego bonito que muchos pedían, la confianza en la defensa, el manejo de balón en la mitad de la cancha y el desborde de los laterales llevaron a que Santa Fe buscará el segundo gol en los pies de Oscar Rodas quien al minuto 73 puso a saltar de nuevo a los hinchas.
Los cambios que realizó Boyacá sirvieron para mostrar el nivel en el que se encuentran jugadores como Leider quien con unas jugadas puso a corear el conocido “Leider calimenio oh oh oh”; mientras que con el ingreso de Carreño los hinchas solo le pedían garra para la camiseta; sorpresa fue la que dio el refuerzo de este semestre Jonathan Copete, quien se encargo de desbordar el balón por la lateral y con grandes carreras y pases se acercaba al arco peruano, dejando entre los hinchas el sabor de un jugador guerrero al que sin duda la confianza esta puesta.
Con un 2-0 terminó una noche marcada por la alegría santafereña, Santa Fe ya se encuentra en segunda fase de la Copa Sudamericana y ahora espera su encuentro con el Deportivo Cali, para seguir avanzando en este torneo internacional.
El renovado Nemesio Camacho el Campin seguirá esperando todo el apoyo de los hinchas santafereños que con alegrías y amor demostrarán que el fútbol en Colombia se puede vivir en paz.
Twitter: @Anita_Cardenal
Foto Cortesia de: Zully Martínez.
Twitter: @zully06
