Saludos familia Santafereña,
Independiente Santa Fe enfrentó un nuevo compromiso por Copa Mustang, esta vez frente a un muy necesitado Deportivo Pasto.
Uun partido cargado de emotividad por bando y bando. Para unos representaba dar el primer golpe en esta seguidilla de partidos entre estas dos escuadras, para otros se definía todo un año de trabajo con miras al descenso.
Santa Fe tenía en mente sumar a como diera lugar, uno o tres puntos servían ya que se contaba con la ventaja de cerrar esta fase de Copa Mustang de local frente al Deportivo Cali. Al parecer Basílico González conoce a tal punto el equipo que sabe cuándo se debe ganar atacando, y también cómo ganar defendiendo y sus dirigidos creen en él, y él cree en Dios, y hoy por hoy Dios tiene la albirroja puesta.
Santa Fe formó con: Julio, Lozano, González, Valdés, Villarraga, Anchico, Torres, Quintero, Seijas, Arrechea y Nazatih.
Muy temprano se dió apertura al marcador, en una falta cometida cerca de tres cuartos de campo Juan Carlos Quintero mandó un preciso balón al corazón del área, balón que posteriormente Carlos Valdés recibiría para darle dirección de gol, el 0-1 parcial y que alivianaba las cargas para los cardenales.
Acto seguido se dió la primera sustitución, ingresó Sergio Otálvaro por Lozano, sub 18.
Desde ese instante el partido fue uno solo: Santa Fe defendiendo con mucha jerarquía y Pasto atacando como podía.
Las mayores oportunidades para el expreso rojo se dieron cuando en medio de las descolgadas de sus laterales o sus volantes se contragolpeaba a un nervioso y confundido Deportivo Pasto.
Luis Manuel Seijas fue protagonista de una de las acciones más claras, pero para desgracia santafereña el balón se desvió un poco de la portería nariñense.
Para la segunda etapa Germán González planteó un partido inteligente desde varios flancos.
Santa Fe muy temprano había asegurado el gol, no tenía mayor afan por atacar mientras que el Pasto se jugaba la vida, entonces era innecesario recurrir al esfuerzo físico. Santa Fe se defendía.
Desde este punto del partido fue imposible evitar recordar a esos equipos de Basílico que en el 2005 sin mayor vistosidad se defendían como fieras y sacaban resultados increíbles. Hoy el equipo trató y jugó como en esos tiempos, asegurando el marcador.
Vale la pena resaltar que si bien hubo partidos donde la defensa generaba ciertas dudas, hoy demostró una frialdad inmensa para defender el arco. Santa Fe sabe atacar, y sabe defender.
Hoy se notó mayor estabilidad del bloque defensivo, en el que los volantes extremos se presentaron dinámicos a ratos. Es notable la seguridad que brinda Villarraga por la banda izquierda, que si bien en la primera parte no fue muy fuerte, en la segunda mejoró notablemente. También Andrés Felipe González, criticado por muchos pero que hoy no dejó pasar una sola pelota aéra. Así es que es Andrés! Valdés… fuera de discusión este gran central que hace rato merecía marcar con la albirroja.
Rondando la mitad de la segunda parte se presentó una nueva sustitución: ingresó Mario Gómez en lugar de Cristian Nazarith, de enorme sacrificio.
El Pasto no pudo soportar la carga sicológica de perder tan rápido, de jugarse tantas cosas y de estar solo, porque si algo es evidente es que el Pasto estuvo solo y no solo hoy, desde que empezó el escándalo por el partido frente al Real Cartagena se evidenció que el pasto está solo frente al fútbol en Colombia, y no tanto por su gente, que sin duda es noble y lo acompaña, el Pasto está solo y por eso descendió.
El conjunto nariñense terminó sin tres de sus hombres, uno de ellos su líder y capitan, Centurión, que fue el primero en caer en la batalla. Posteriormente fue cayendo su compañero y su técnico. Pudo el dolor la impotencia al fútbol y el corazón.
Al final Santa Fe no celebró el triunfo. Pasto descendió, y no por culpa de Santa Fe sino por culpa de todo lo que es el fútbol en Colombia.
Agustín Julio, Juan Carlos Quintero y Yulián Anchico, entre otros, trataron de consolar a los jugadores del equipo del sur de Colombia, que veían como su esfuerzo terminaba bajo los pies del equipo bogotano.
Al Deportivo Pasto, equipo noble, de gente cálida y honesta, lo esperamos de nuevo en la máxima categoria. Santa Fe hoy logró su botín a causa del dolor de todo un departamento pero la vida da muchas vueltas y quizá mañana el Santa Fe pueda devolver al Pasto algún detalle en medio del deporte.
Con este resultado Santa Fe se ubica sexto en la tabla de clasificaión, suma 27 puntos y necesita de al menos una unidad más para entrar a los ocho de final de año.
Su próximo encuentro por Copa Mustang es frente al Deportivo Cali en el estadio el Campín.
La próxima parada del expreso es con el mismo rival, en el mismo escenario pero con otras necesidades.
El partido del miércoles por Copa Postobón se perfila como uno de los más complicados, por ahora, para el expreso rojo, sobretodo por ser el de la revancha, ahora sí con su gente, del Deportivo Pasto, por ser una final y por ser el último partido frente a un equipo grande en quién sabe cuánto tiempo en tierra nariñense.
Se prevén novevades en la nómina de cara a este compromiso, depronto la reaparición de Maximiliano Flotta y el regreso de Julio Gutiérrez a la delantera.
