En la primera presentación de Santa Fe como local frente a sus hinchas en esta Copa Mustang II el profesor Germán González García mandó al gramado del Campín a:
Julio(C:1); Otálvaro(C:4),A.F González(C:2),Valdéz(C:3), Villarraga(C:27); Quintero(C:25), Castro(C:32) Sub 18, Pérez(C:10), Anchico(C:5); Gutiérrez(C:11) y Arrechea(C:7). * C: Número de camiseta.
Al «Coloso de la 57» llegaron cerca de 10.000 santafereños encaminados en esta nueva luz de esperanza hacia la nueva estrella.
El desarrollo del partido, en sus primeros minutos, se destacó por la manera en que Santa Fe marcaba el paso de sus defensas a posiciones de ataque y marca mucho más adelante de la línea de defensa, así como una solidaridad en cada uno de los jugadores para poder presionar al rival y no dejarlo plantar ni entusiasmar durante el juego. Muy contrario a lo que muchos periodistas e hinchas pensaban Santa Fe no jugó a la defensiva, mostró variantes interesantes y sobretodo, al Campín volvió
Muy temprano, al minuto 8, se realizó la primera sustitución en los dirigidos por «Basílico», el juvenil Carlos Castro sale, entra Mario González (C:17).
La primera anotación vino de una sobresaliente jugada de Omar Pérez quien con mucha precisión envió un pase en medio de la defensa visitante justo a la posición que había ganado Julio Gutiérrez, quien domino el balón con el pecho y cerca del punto de pena máxima fusiló para el 1-0 parcial.
Santa Fe no se escondió y trató de seguir generando riesgo con su nueva idea de juego. Algunos jugadores del Chicó apelaban al juego fuerte para tratar de cortar el circuito implementado por los «cardenales» motivo por el cual llegó la primera expulsión por parte de un defensor del equipo visitante.
Ahora el partido cambiaba de condiciones, Santa Fe con 11 y Chicó con 10, con lo cual la hinchada pidió más goles.
El primer tiempo finalizó con la victoria parcial del eterno Primer Campeón.
Para la segunda etapa los asistentes al Nemesio Camacho pudieron disfrutar de un emocionante partido hasta el último minuto de juego.
Promediando el minuto 7 de la segunda mitad en un peligroso tiro libre al frente del área santafereña el Chicó, con un cañonazo, logró la paridad: 1-1.
Cuando se pensaba en una rápida remontada de los Albi-rojos llegó lo inesperado, un 1-2 que llegó en un error de la defensa que en un balón de costado hacia el área descuido sus marcas y dejó libre a un jugador del Chicó, quien, con un cabezazo certero marcó para la parcial victoria de los Boyacenses.
En las tribunas las caras de los espectadores mostraban tristeza porque una situación parecida se vivió con el Deportes Quindío, la imagen estaba viva y perder de local no estaba entre los planes de nadie.
Germán González movió sus fichas. Ingresaron Alejandro Bernal (C:18) y Cristian Nazarith(C:29) por Otálvaro y M. González respectivamente.
El equipo Bogotano no se descontroló y asumió el marcador con mucha valentía y de inmediato trató de encontrar los goles necesarios para lograr la victoria. Luego de una aparente mano en el área del equipo visitante se sanciona pena máxima a favor de los Albi-rojos, el encargado de ejecutarla era Yovanny Arrechea, quien en su primer disparó logró anotar pero el juez obligó a repetir el cobro debido a una supuesta invasión al área; en posterior remate Arrechea la envía fuera del arco. El desazón era evidente en el delantero Santafereño quien desde ese punto lució un poco desconcentrado pero tratando de corregir su error.
En una jugada muy interesante Julio Gutiérrez gana posición, deja a un defensa y dispara cerca del área de las 18: Gol, 2-2. Sorpresivamente el marcador mostraba una cara amable.
Minuto 21 del segundo tiempo y Santa Fe lograba la paridad.
Pasados 10 minutos y en otra genial jugada por parte de Gutiérrez quien es derivado en el área del Chicó el juez central sanciona pena máxima, la cual ejecuta Omar Pérez que para alegría de los santafereños ponía el 3-2 parcial.
Santa Fe iba al todo por el todo, trato de jugar con tres delanteros, con el chileno al costado izquierdo y alternado con Arrechea por el derecho y Nazarith por el centro. Fruto de esto la impresionante remontada del marcador, pero faltaba más.
A escasos segundos de terminar el juego Pérez manda un quirúrgico pase al fondo, Nazarith gana la posición y sutilmente lo manda con destino de gol, y como siempre, al menos en este partido, Gutiérrez, la gran figura de la fecha, se encargó de asegurar el gol: 4-2.
Al finalizar el encuentro todo era alegría en las tribunas santafereñas, en la primera presentación de Santa Fe en Bogotá se vivió mucha emoción, drama y sobretodo alegría.
La tribuna sólo tenía algo que agregar al final del partido, un ensordecedor canto: «Gracias Chileno».
Geuseppe González Cárdenas.
